Con el mal tiempo y la lluvia golpeando contra la ventana, nos imaginamos con una taza humeante en la mano y  soplando un caldo caliente. Como si de un anuncio de sopas se tratara.

Pero para degustar esta sopa, es mejor que estemos sentados delante de un plato hondo.  Y con cuhillo y tenedor!! Así podremos cortar el huevo y atacar a los mejillones a gusto (usando sus cáscaras como cucharas).

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Tiempo elaboración:

30 minutos
Ingredientes
personas
Elaboración
  1. Limpiar los mejillones y quitarles las barbas.
  2. Picar el ajo bien pequeñito y cortar el pan seco (primero en rebanadas finas y luego éstas en seis partes o así, según el grosor de la barra).
  3. En un recipiente que sea sobre todo ancho (más que alto, porque luego vamos a hacer ahí también los huevos, y si no se nos pierden por la sopa), como por ejemplo una paellera, ponemos a dorar un poquito el ajo picado (no demasiado que luego se sigue sofriendo con el pan), incorporamos el pan, y dejamos freír un poco a fuego suave para que se dore todo despacito y el pan se empape bien de sabor.
  4. Añadir el agua y la sal (a la hora de echarla, tener en cuenta que va a llevar también el jamón, así que por si acaso echar de menos, y luego ya se rectificará).
  5. Cortar el jamón serrano en taquitos pequeñitos y agregar a la sopa.
  6. Mientras se hace la sopa (está hecha enseguida, pero mejor dejar al menos 20 minuticos), abrimos en una sartén los mejillones. Hay que tapar la sartén para que se abran con el vapor de la  propia agua que van soltando.
  7. Cuando esté todo listo, echar los huevos a la sopa, repartiéndolos por el recipiente, y dejar que se hagan con el fuego bien bajo.
  8. Poner en cada plato unos cuantos mejillones (4-5 por cabeza), uno de los huevos y echar la sopa por encima.
Trucos y Consejos

Lo ideal es que queden los huevos con la yema sin hacer, y para eso lo mejor es que se hagan con el fuego muy bajo (o incluso apagarlo y dejarlos unos minutos con el calor de la propia sopa).

De todos modos, si no queremos arriesgarnos, podemos hacerlos también escalfados, echarle sin más huevo duro picado por encima, o batir un huevo para toda la sopa y mezclarlo con ella una vez la hallamos quitado del fuego.

Por lo demás, la sopa de ajo, además de ser rica, barata y socorrida, puede ser una base fantástica para completar con casi cualquier otro ingrediente. En vez del jamón y los mejillones se puede poner con otras cosas: hongos o setas, pescado, carne, queso, … Incluso hay gente que hace la sopa de ajo (la elemental) con un poco de tomate.

Una Respuesta

  1. edurne

    jaja, alberto, peazo de entrada!! o sea q asi estabas cuando ibamos a empezar la sopa? yo q no me entere…la foto te la teniamos q haber sacado a ti!!
    muchas gracias x la publicidá!! besazo!!

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